El Juzgado de Faltas de la Municipalidad te recuerda que el alcohol es un tóxico depresor del sistema nervioso. Aunque no lo notes, una sola copa de cerveza, vino o licor disminuye tu capacidad de conducción.
Recuerda siempre:
No hace falta estar ebrio para estar en riesgo.
El café no anula los efectos del alcohol.
Bajo sus efectos, tu cerebro no reacciona igual y eso pone en peligro tu vida y la de los demás.
1 de cada 2 muertes en el tránsito tiene relación con el consumo de alcohol.
Conducir bajo los efectos del alcohol:
Embota los sentidos y reduce la atención.
Aumenta los tiempos de reacción.
Afecta la visión, especialmente la periférica y la nocturna.
Genera falsa seguridad y promueve conductas imprudentes.
¡Cuidá tu vida y la de los demás! Si vas a conducir, NO TOMES.

